Se
acerca el final de la campaña y con él termina el primer año de los
estudios del IVM. Los análisis han proporcionado interesantes resultados
que nos ayudan a entender mejor nuestro entorno y esclarecen técnicas efectivas para trabajar bajo condiciones de extrema sequía.
La
modificación de la superficie foliar del viñedo y la utilización de CaCO3 disuelto formarán parte de nuestra metodología de trabajo en los próximos años, ya que hemos comprobado que éstas técnicas minimizan los efectos de la sequía.
El
estudio de investigación realizado por nuestro equipo será publicado
próximamente esperando que sirva de guía para viticultores y bodegas.
En
la imagen, Diego Fernandez Pons, Director técnico del Instituto, durante la
cata de los vinos del IVM 2014.